SI TIENES PROBLEMAS PARA REPRODUCIR!

Ilustración 1MABARADIO

 Haz click Aquí.

 

Un zoo marino de cristal

El maestro de naturalezas muertas Guido Mocafico ha invertido años en una misión: localizar y fotografiar las criaturas marinas de vidrio elaboradas hace un siglo y actualmente dispersas en instituciones y museos de todo el mundo. Las figuras son obra de los artistas del vidrio checos Leopold Blaschka y su hijo Rudolf, quienes entre 1863 y 1890 crearon cerca de 10.000 modelos de 700 especies de pulpos, medusas, anémonas, amebas, corales y otros invertebrados marinos.

La fascinación por la historia natural, especialmente por el mar, vivió un boom a mediados del siglo XIX, pero obtener y preservar animales marinos entrañaba una enorme dificultad. Por eso las realistas reproducciones de los Blaschka eran muy demandadas no solo como material didáctico, sino también por su valor artístico.

Estas criaturas marinas nacieron para ayudar a los científicos. Hoy protagonizan espectaculares fotografías de naturalezas muertas.

Descendiente de una familia de artistas del vidrio, de las manos de Leopold salían zarcillos que semejaban hilos de seda y pólipos que bien podrían confundirse con gotas de rocío. Las técnicas específicas que utilizó para dar vida a aquellas criaturas de cristal desaparecieron con él y nadie ha sido capaz de replicar su delicado trabajo. Para garantizar la exactitud anatómica de la fauna marina, los Blaschka trabajaban con ilustraciones, con especímenes de colecciones y, más adelante, con animales vivos de acuarios domésticos.

Algunas piezas que al principio se usaban como material de estudio continúan utilizándose hoy en el campo de la docencia, pero muchas otras quedaron obsoletas y acabaron siendo relegadas a los almacenes, hasta que fueron redescubiertas por su excepcional calidad artística y expuestas en colecciones y museos. Una vez localizadas, Mocafico se valió de la fotografía para despertar e infundir vida a los especímenes, que lucen radiantes en un mar de fondo negro.

Este artículo pertenece al número de Septiembre de 2021 de la revista National Geographic.