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Una cisterna de época romana con grabados de barcos en el desierto del Néguev (Israel)

Una excavación arqueológica previa a la urbanización del futuro barrio denominado Rakafot, en Beerseba, la ciudad principal del desierto del Néguev del sur de Israel, ha sacado a la luz lo que en un principio parecía una gran depresión en el terreno, pero que ha resultado ser una cisterna de época romana, de unos 2.000 años de antigüedad, en cuyos muros enyesados han aparecido grabados de barcos y zoomorfos: 13 barcos fueron grabados en el revoque de las paredes, un hecho curioso teniendo en cuenta la ubicación de la cisterna de agua, en pleno desierto del Néguev. Un hallazgo muy parecido fue anunciado hace exactamente dos años: un edificio subterráneo decorado con 120 dibujos de embarcaciones faraónicas, descubierto en Abidos, en el Alto Egipto.

El hallazgo, anunciado hoy por la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA), consiste en una cisterna de 12 metros de profundidad: una vez retirados los sedimentos que la cubrían se ha descubierto una escalera que lleva a la parte inferior de la misma. Muchas de las líneas que componen los grabados se han borrado con el paso de los siglos, pero los investigadores han podido detectar los barcos, un marinero y representaciones zoomorfas. "La forma de la cisterna y la técnica del labrado y la del enyesado sugieren que la estructura es del primer o segundo siglo de la era cristiana; probablemente abasteció a una residencia del periodo romano situada a unos 800 metros de distancia, recientemente excavada por los doctores Fabian y Cohen-Sason de la Universidad Ben-Gurión del Néguev", expresa Davida Eisenberg-Degen en el comunicado de la IAA. La cisterna estuvo en uso hasta fechas relativamente recientes, pues en su interior se han encontrado fragmentos de cerámica, proyectiles de artillería y partes de armas de la Primera Guerra Mundial. El hallazgo de antiguas estructuras subterráneas es bastante frecuente en Israel: el año pasado apareció un enorme depósito subterráneo, de finales de la Edad del Hierro, al este de Tel Aviv.